Acapetahua, un tesoro escondido en el estado de Chiapas, México, se revela como un destino turístico único que combina la rica herencia cultural de la región con una belleza natural impresionante. Este pintoresco pueblo, ubicado en la costa chiapaneca, ofrece a los visitantes una experiencia auténtica que fusiona la calidez de su gente, la historia indígena y la biodiversidad que caracteriza esta parte del país.

La historia de Acapetahua se entrelaza con las raíces indígenas que han dejado una huella profunda en la región. El nombre mismo del pueblo, de origen náhuatl, significa "Lugar de cañas" y rinde homenaje a la abundancia de este recurso natural en la zona. A lo largo de los años, Acapetahua ha sido testigo de la convergencia de diversas culturas, desde las comunidades indígenas hasta la influencia colonial española. Este legado histórico se manifiesta en la arquitectura local y en las tradiciones que aún se mantienen vivas.

El corazón de Acapetahua late en su centro histórico, donde las calles adoquinadas y las fachadas coloridas cuentan historias centenarias. La Iglesia de San Francisco de Asís, con su arquitectura colonial bien conservada, es un punto focal que atrae a visitantes y locales por igual. Los mercados locales ofrecen una visión auténtica de la vida cotidiana, donde los artesanos locales exhiben sus habilidades y los vendedores ofrecen productos frescos y autóctonos.

Sin embargo, la verdadera joya de Acapetahua es su ubicación en la costa del Pacífico mexicano. Las playas vírgenes que bordean esta región son un refugio para aquellos que buscan escapar del bullicio de la vida cotidiana. La Playa de San Benito, con su arena dorada y aguas cristalinas, es un paraíso para los amantes del sol y el mar. Los visitantes pueden relajarse bajo las palmeras, disfrutar de la brisa marina y sumergirse en las aguas cálidas del Pacífico.

Acapetahua también es conocida por sus manglares, que forman parte del sistema de la Reserva de la Biosfera La Encrucijada. Este ecosistema único alberga una diversidad asombrosa de flora y fauna, incluyendo aves migratorias, cocodrilos y manatíes. Los amantes de la naturaleza pueden explorar los canales serpenteantes de los manglares a través de emocionantes recorridos en lancha, observando la vida silvestre en su hábitat natural.

La gastronomía de Acapetahua es una delicia para los sentidos. Los restaurantes locales ofrecen una mezcla de sabores chiapanecos, con platillos que incorporan ingredientes frescos y autóctonos. Los mariscos frescos son una especialidad, y los visitantes pueden deleitarse con delicias como ceviche, pescado a la talla y camarones al mojo de ajo. La influencia de la cultura indígena también se refleja en platos como el tamal de chipilín, una deliciosa mezcla de masa de maíz y hojas de chipilín.

Acapetahua, además de sus atractivos naturales, es un punto de partida para explorar otras maravillas cercanas. A poca distancia se encuentra la Laguna de la Mancha, un oasis de aguas tranquilas rodeado de vegetación exuberante. Aquí, los visitantes pueden realizar paseos en bote, observar aves y disfrutar de la serenidad de este entorno natural.

Para aquellos en busca de aventuras más activas, la Sierra Madre de Chiapas ofrece oportunidades para el ecoturismo y el senderismo. Las rutas bien marcadas llevan a los exploradores a través de bosques frondosos, cascadas y paisajes montañosos impresionantes. La Reserva de la Biosfera El Triunfo, cercana a Acapetahua, es un paraíso para los amantes de la vida silvestre, con especies como el jaguar, el mono araña y una amplia variedad de aves.

Así entonces, Acapetahua, Chiapas, se presenta como un destino turístico completo que ofrece una experiencia única de historia, cultura y naturaleza. Desde las calles empedradas de su centro histórico hasta las playas prístinas que bordean la costa, este pueblo cautiva a los visitantes con su autenticidad y encanto. Acapetahua es un recordatorio de la riqueza diversa que Chiapas tiene para ofrecer, un destino donde la historia se entrelaza con la naturaleza para crear una experiencia de viaje inolvidable.


La comunidad de La Palma, en Acapetahua, Chiapas, tiene una fuerte tradición de fomento al turismo comunitario, basado en su historia y orgullo de sus tradiciones. Uno de sus mejores lugares es el Grupo Ecológico San Carlos, que será tu anfitrión en este antiguo pueblo de pescadores, inmerso en la Reserva de la Biósfera La Encrucijada, y ofrece servicios de hospedaje, alimentación y paseos en lancha.

Los habitantes de esta comunidad se han organizado y ofrecen a sus visitantes, además de la gran diversidad de su flora y fauna, la diversidad de su cultura: historias y leyendas, gastronomía, usos y costumbres, fiestas patronales y más. La hospitalidad habita cada esquina de La Palma.

Horario

Lunes a domingo 24 horas.

Tarifas

Variables previa reservación.

Contacto

Sitio web: www.turismochiapas.gob.mx

Ubicación

Acapetahua, Chiapas