Campamento en Ex Hacienda de San Jacinto Ixtoluca, Morelos Mexico

Tlaquiltenango es un municipio ubicado en el estado de Morelos, México. Se encuentra aproximadamente a 100 kilómetros al sur de la Ciudad de México. Se encuentra en la región sur de Morelos, en una zona conocida como la "Región Oriente". El municipio tiene una topografía variada, con áreas montañosas y valles fértiles. Además, está atravesado por el río Yautepec, lo que contribuye a su belleza natural.

Tlaquiltenango disfruta de un clima cálido durante la mayor parte del año. Las temperaturas promedio oscilan entre los 25 y 30 grados Celsius. Es común que el clima sea soleado y agradable, lo que lo convierte en un lugar atractivo para visitantes y residentes.

El municipio de Tlaquiltenango cuenta con varios atractivos turísticos. Entre ellos se encuentran las aguas termales, que son muy populares en la zona. Las personas visitan estos balnearios para relajarse y disfrutar de las propiedades curativas del agua termal. Además, hay lugares de interés histórico y cultural, como la Parroquia de San Sebastián Mártir y la Ex Hacienda de San José Vista Hermosa.

En términos de gastronomía, Tlaquiltenango se destaca por sus platillos tradicionales de la región. Algunos de los alimentos típicos incluyen la barbacoa de res, el mole verde, los tamales y el pozole. También es famoso por sus frutas tropicales, como el mango, la guayaba y el mamey.

Aquí mencionaremos algunos platillos típicos y alimentos representativos de la gastronomía de Tlaquiltenango:

Barbacoa de res: Es uno de los platillos más emblemáticos de la región. Se trata de carne de res cocinada lentamente en un horno subterráneo. Se sirve generalmente en tacos acompañados de diversas salsas y condimentos.

Mole verde: El mole verde es otro platillo tradicional de la zona. Se elabora con una mezcla de chiles verdes, hierbas, especias y semillas, lo que le confiere su característico color y sabor. Se sirve con carne, generalmente pollo, y se acompaña de arroz y tortillas.

Tamales: Los tamales son una parte importante de la cocina de Tlaquiltenango. Se preparan con masa de maíz rellena de diversos ingredientes, como carne, queso, rajas (chiles asados), frijoles, entre otros. Se envuelven en hojas de maíz y se cocinan al vapor.

Pozole: El pozole es un caldo a base de maíz y carne de cerdo, sazonado con especias y condimentos. Se sirve con acompañamientos como lechuga, rábanos, cebolla, chiles y limón. Es un plato tradicional y muy popular en la región.

Si visitas Tlaquiltenango, te recomendaría explorar los mercados locales y los restaurantes tradicionales para degustar la auténtica gastronomía de la zona.

Ahora bien, a lo largo del año Tlaquiltenango celebra diversas festividades tradicionales. Una de las más destacadas es la fiesta en honor a San Sebastián Mártir, el santo patrono del municipio, que se celebra el 20 de enero. Durante esta festividad, se llevan a cabo procesiones, danzas tradicionales y eventos religiosos.

En general, Tlaquiltenango es conocido por su clima cálido, sus aguas termales, su rica gastronomía y su patrimonio cultural. Es un lugar agradable para disfrutar de la naturaleza, relajarse en los balnearios y conocer la cultura local.

Tlaquiltenango, al estar ubicado en una región rica en belleza natural, ofrece diversas opciones para el ecoturismo. Aquí mencionaremos algunas actividades y lugares relacionados con el ecoturismo en Tlaquiltenango y sus alrededores:

Parque Natural Barranca de Amanalco: Este parque se encuentra cerca de Tlaquiltenango y es un lugar perfecto para el ecoturismo. Cuenta con senderos para caminatas y áreas para acampar. También puedes disfrutar de la vista panorámica de la barranca y sus paisajes naturales.

Cascadas de San José: Ubicadas en las cercanías de Tlaquiltenango, las Cascadas de San José son una opción atractiva para los amantes de la naturaleza. Puedes realizar caminatas y admirar las hermosas cascadas rodeadas de vegetación exuberante.

Paseos en bicicleta: Tlaquiltenango y sus alrededores ofrecen hermosos paisajes y carreteras secundarias que son ideales para paseos en bicicleta. Puedes recorrer las áreas rurales, disfrutando de la belleza natural y la tranquilidad del entorno.

Recuerda que al realizar actividades de ecoturismo, es importante hacerlo de manera responsable y respetuosa con el medio ambiente. Asegúrate de seguir las reglas y regulaciones establecidas en cada lugar, y recuerda dejar todo como lo encontraste, sin dejar basura ni dañar la flora y fauna local.

Para llegar a Tlaquiltenango, Morelos, tienes varias opciones de transporte dependiendo de tu ubicación actual. A continuación, te proporcionaré algunas de las formas más comunes de llegar a Tlaquiltenango:

Si tienes tu propio automóvil o rentas uno, puedes llegar a Tlaquiltenango por carretera. Desde la Ciudad de México, puedes tomar la autopista México-Acapulco (Autopista del Sol) con dirección hacia Acapulco. Después de aproximadamente 80 kilómetros, toma la desviación hacia la derecha en la salida hacia Tlaquiltenango. Sigue las indicaciones en la carretera para llegar al municipio.

Otra opción es tomar un autobús desde la Ciudad de México o desde otras ciudades cercanas. Hay varias líneas de autobuses que ofrecen servicios a Tlaquiltenango desde la Terminal de Autobuses del Sur en la Ciudad de México. Verifica las opciones disponibles y los horarios con las diferentes compañías de autobuses.

Si prefieres no conducir y no quieres utilizar el transporte público, puedes contratar un servicio de taxi o transporte privado desde tu ubicación actual hasta Tlaquiltenango. Hay empresas de transporte que ofrecen servicios de puerta a puerta.

Una vez que llegues a Tlaquiltenango, puedes moverte dentro del municipio en taxi local o utilizando el transporte público, como camiones o combis, para desplazarte a diferentes puntos de interés.

La construcción de la Ex Hacienda de San Jacinto Ixtoluca data del siglo XVI, y en ella se recibía y se purificaba todo el mineral extraído de la Sierra de Huautla. Actualmente quedan en el lugar los muros y pilares que sostenían al enorme edificio, lo mismo que los acueductos, en los que sobresalen los amates, cuyos tallos y raíces se aferran a la roca ofreciendo un paisaje realmente impresionante.

Este misterioso enclave ha sido adaptado para comodidad de quienes deseen conocer su historia y disfrutar de la paz y la tranquilidad del medio natural. En un amplio paraje de selva baja caducifolia, San Jacinto Ixtoluca cuenta con cuatro habitaciones para hospedarse, dos albercas, amplios jardines y canchas de fútbol.

Su área para acampar ofrece cabalgatas y safari fotográfico. En este tranquilo paraje también se pueden degustar platillos tan extraordinarios como la iguana, el conejo y la codorniz.